CONDENARON A LA CÁRCEL A CUATRO POLICÍAS
El Tribunal en lo Criminal Nº 3 resolvió condenar a tres efectivos de la Brigada de Narcotráfico a cuatro años de prisión y a dos años y seis de ejecución condicional a un cuarto, luego de hallarlos responsables de las serias lesiones que le provocaron a un joven, en un hecho ocurrido en 2015 en el barrio Cuyaya.
Antes de las 13 el Secretario de Cámara Nicolás Besin Calderari leyó la parte dispositiva del fallo donde daba cuenta que Juan Javier Octavio Díaz, Víctor Fernando Galarza y Claudio Anibal Zerpa fueron hallados coautores penalmente responsables del delito de lesiones graves agravadas por la calidad del sujeto activo (funcionario policial) y se ordenó la inmediata detención.
Además se condenó a Mariana Jimena Campos a dos y medio de ejecución condicional por ser la autora del delito de partícipe secundario.
Cabe recordar que en la audiencia anterior, donde se produjeron los alegatos el fiscal de Cámara habilitado Alejandro Bossatti había solicitado la pena de 6 años y medio de prisión para los cuatro efectivos policiales, que llegaron a estas instancias judiciales en libertad continuaban prestando servicios en la fuerza provincial.
Al término de la audiencia, Diego Copa víctima del feroz ataque que sufrió en 2015 por parte de los efectivos que trabajaban en la División de Narcotráfico, cuando esperaba a su novia en el barrio Cuyaya, dijo que se encontraba tranquilo y que “por suerte terminó todo”.
Sobre el hecho
El hecho por el que los efectivos Juan Díaz, Víctor Fernando Galarza, Claudio Zerpa y Mariana Campos llegaron a estas instancias judiciales, ocurrió el 3 de febrero del 2015 casi en la intersección de las avenidas Doctor Baldi y Olavarría del barrio Cuyaya, cuando Diego Copa se encontraba sentado en uno de los escalones de una verdulería y de un vehículo particular marca VW Pointer de color gris, sin mediar palabras se abalanzaron sobre Copa y le propinaron una feroz golpiza con golpes de puños, rodillazos y una vez reducido en el piso, lo estrangulararon hasta sofocarlo.
Según la requisitoria fiscal, el joven una vez reducido y esposado, continuó siendo brutalmente atacado por los efectivos que se encontraban de civil, sin identificación alguna ni orden de detención que pesara sobre Copa.
El joven sin tomar conocimiento de lo que ocurría fue llevado hasta la parte trasera del vehículo y uno de ellos le propinó un violento golpe en el oído derecho provocándole una «perforación timpánica e hipoacusia conductiva profunda el oído derecho».
Horas después de mantener a la víctima demorado con serias lesiones y sin dar aviso al personal del Same para que lo asista, los efectivos decidieron liberarlo, por lo que el joven se dirigió al hospital por las graves heridas que presentaba, entre otras politraumatismos, fractura múltiple nasal y costillas quebradas.